¡NO LE HUYAS MÁS! EL AMOR NO SOLO TE ROBA EL CORAZÓN SINO TAMBIÉN UNOS KILITOS



Todos hemos sido seducidos, perturbados, alegrados, desconcertados por el poder del amor.  

Una rosa roja, chocolates, corazones y perfumes; regalos sorpresivos que alimentan el alma de cualquiera que haya sido embatido por el terrible e impactante flechazo de cupido.

Los individuos se esfuerzan por amor, poetizan por amor, respiran por amor y fallecen por amor. La conclusión es que el amor es el motor de todo ser humano.

Tan impactante sentimiento humano está asociado a la liberación de hormonas, de distintos neurotransmisores y áreas de la corteza cerebral; como si fuesen circuitos emocionales que se integran y retroalimentan.

El enamoramiento está mediado por la concentración de dopamina, la cual produce euforia, un aumento de energía, y motivación inquebrantable.

La norepinefrina está relacionada con hiperactividad, insomnio, pérdida de apetito, temblor y taquicardia.
La serotonina es otra sustancia involucrada en el enamoramiento que causa el pensamiento obsesivo hacia la persona amada.

Durante el proceso de enamoramiento sucede la fastuosa liberación de estas y otras muchas sustancias químicas en nuestro cuerpo, y solo en el cerebro pueden provocar tal grado de respuesta que sin querer dará por resultado gasto de energía como si realizaramos intensa actividad física; puede suceder que hasta nos olvidemos de comer…nuestra ansiedad se centra en otro individuo.

El verdadero enamoramiento ocurre cuando se produce y se libera feniletilamina, endorfinas y encefalinas. Las endorfinas y encefalinas tienen en nuestro organismo el efecto de la morfina y el opio; al liberarse, es inmediata la adicción que puede provocarnos y se suma el efecto de la fenietilamina que provoca una reacción parecida a las anfetaminas. Gracias a esta sustancia tenemos el efecto supresor del apetito; y aunque pareciera la reacción de un “pason” de drogas (morfina+opio+anfetaminas) agregando la respuesta de nuestras hormonas sexuales estrógenos y testosterona, todo ello es un efecto colateral de lo que sucede en nuestro cerebro.

El amor es una reacción fisiológica generada por varias estructuras cerebrales en las que unas y otras muestran activación y algunas inactivación. Vamos a enumerar algunas de estas partes cerebrales y qué es lo que realizan en este proceso:

1.-Núcleo accumbens- Produce placer y su activación es por la liberación de dopamina
2.-El cíngulo anterior, la corteza piriforme y la ínsula-Registran el cambio del estado fisiológico y dirige el comportamiento selectivo hacia la pareja adecuada. Me gustaría comentar que si no hemos escogido a la mejor pareja ha sido por la culpa de estas áreas de la corteza cerebral.
3.- El área tegmental ventral en el tallo cerebral- Es un megacircuito que motiva las conductas para la sobrevivencia y la reproducción.
4.-Núcleo caudado- es el responsable de considerar al ser amado como algo novedoso y único. Y creíamos que era culpa de la miopía
5.- Sistema Límbico Cerebral-Permite las respuestas emocionales conscientes.
Por fin, la cordura aparece…a veces.
6.- Circunvoluciones del cíngulo y del hipocampo, la superficie orbitaria del lóbulo frontal y la corteza insular- Son los encargados de la actividad del estómago, intestinos y otras vísceras (incluye la vejiga); básicamente la sensación de “mariposas” en el estómago.
7.-La corteza cingulada anterior-Determina la conducta del enamoramiento.
8.-La corteza insular- Regula los cambios en la temperatura corporal…”sonrojarse” y algunos cambios en el tacto..quien no ha sudado de pies y manos cerca de la persona que nos ha atrapado, simplemente no se ha enamorado. Parece de risa, pero el olor de pies si cambia 
9.- La disminución de la densidad del transportador de serotonina en las plaquetas de los sujetos enamorados es similar en el Trastorno Obsesivo Compulsivo, ya saben…si eres obsesivo la causal son las plaquetas.

Todas estas estructuras se encuentran involucradas en las distintas etapas del enamoramiento
Y entonces..cómo nos ayuda todo esto con las calorías

Bueno, primero ante el deseo de ver a alguien, o el simple hecho de evocarlo, hace que nuestra frecuencia cardíaca aumente al menos a 130 latidos por minuto; manteniendo este número de latidos, disminuiremos la grasa corporal al igual que una sesión de ejercicio aeróbico. Digamos que nuestra mente se mantiene evocando al ser amado por lo menos 20 veces al día, sin ocio. Si estamos desocupados pues son más reminiscencias por lo tanto, mantenemos al cuerpo ejercitándose, sin tomar en cuenta que la postura mejora, los músculos del cuerpo se mantienen en estado de alerta. ¡Qué maravilla!. Si no tienes cerca a tu amado, tómale una foto, también es de gran ayuda.

Prácticamente es imposible mantener el estado de enamoramiento que nos permite bajar de peso por más de 3 meses según algunos científicos; el amor entra por el cerebro y se mantiene como una luz centelleante y cegadora; parpadeamos más (se queman 5 calorías por minuto al parpadear continuamente) eso sucede, claro si no tenemos alguna alteración visual, tenemos que recordar que la emoción del amor es la que impera para este fin.



El segundo quemador de calorías es el beso. Se requieren de varios músculos faciales, para dar un beso. Hasta el beso más simple quema aproximadamente 10 calorías y si le agregamos la emoción del mismo, más la bendecida intervención de la lengua se gastarán de 17 a 20 calorías por minuto. Es difícil controlar el tiempo cuando estamos besando, sobre todo si estamos con los ojos cerrados, pero si podemos dejar libre nuestra emoción; luego entonces sumaremos las calorías que se han devorado por el aumento en la frecuencia cardiaca y la intensidad en los latidos, pues ya hicimos una buena rutina quema-calorías.

La tercera bendición que nos regala el amor para gastar calorías es la liberación de adrenalina de manera constante. Si, la sensación de mariposas en el estómago quema alrededor de 20 calorías por minuto; lo mismo que si viéramos una película de terror, solo que esta sensación es más placentera.  

El cuarto ultraquemador de grasa es la actividad sexual, una sesión de amor en posición de misionero quema aproximadamente 240 calorías por cada 30 minutos. El orgasmo quema alrededor de 150 calorías

Después de toda esta información sugerimos que se ENAMORE..con locura, con delirio, con frenesí. Y bueno si después de esto bajamos de peso, hemos conseguido nuestro objetivo.
Sea feliz siempre.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Las Calorías, amigas o enemigas?

El Estrés y la Alimentación van de la mano